Día grande para la localidad valenciana de Benavites el año anterior de celebrar su XX aniversario. Calles llenas de gente, bares repletos, balcones con su aforo al completo y un ambiente que olía a fiesta como hacía años que no sucedía. Un mes de enero en el que los pueblos cercanos hicieron no coincidir sus festejos, que bueno sería para la fiesta que cada año fuera así. Adquiridos dos toros del hierro albaceteño de Las Ramblas, a las 16:30 empezó la lidia el nº 30 de nombre Aguilucho, toro negro, de unos 500 kg de peso que nada más salir recortó a dos socios de la peña apretando a uno de ellos durante más de 10 metros pero mostrando su defecto en la visión y citado por varios rodadores dejó solo en un susto y recuerdo dicha carrera. Más allá de la salida el toro mostró no llevar nada dentro y dejándose ver por todas las calles del pueblo dió pasó a su hermano de sangre. El nº 40, Tasadoro, colorado con rasgos castaños, estaba falto de kilos y no era agradable a la vista. Salió rápidamente del cajón para dejarse ver tambíen por el pueblo y no centrarse en ningún momento en los rodadores. Después de un descanso pasadas un poco las 7 de la tarde se embolaron los dos toros con una multitud de aficionados presentes que propiciaron unas emboladas muy bonitas como merece esta tradición tan nuestra. Cortaron las cuerdas dos socios de la peña y en ambas salió Kama al rabo. Lo único a destacar fue que el colorado se centró en la arena entrando a varios quiebros y apurando en las rodadas mejorando así su imagen y la del día en general. Muy buena idea lo de embolar antes de cenar ya que en estas fechas el frío afecta a la participación nocturna en los festejos. Ahora a esperar el veinte aniversario de la Penya Bou de Gener de Benavites para seguir disfrutando de nuestra fiesta dels Bous al Carrer. 
